Elon Musk, el hombre más rico del mundo y líder del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) en el gobierno de Donald Trump, ocupa un lugar importante en el centro del poder estadounidense.
El gobierno de Trump despidió a un grupo de fiscales involucrados en los casos penales del 6 de enero, y exigió los nombres de agentes del FBI involucrados en esas investigaciones.